lunes, marzo 24 2025

Las comunidades del PP chocan con Sanidad por el plan para controlar la gripe, que se queda en el aire

La reunión de la Comisión de Salud Pública para debatir la primera estrategia común contra los virus respiratorios concluye sin consenso: el documento, que incluye el uso gradual de la mascarilla, se seguirá estudiando hasta una nueva reunión

Sanidad propone un uso gradual de la mascarilla según empeore la temporada de gripe en España

El plan propuesto por el Ministerio de Sanidad para controlar la gripe a través de un uso gradual de la mascarilla en función del empeoramiento de la transmisión se ha quedado en el aire. La Comisión de Salud Pública en la que iba a aprobarse el documento, donde están presentes los directores generales de todos los territorios, ha terminado sin acuerdo, según ha confirmado el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla. “Las comunidades autónomas del PP frenan el documento redactado por sus propios técnicos para tener por primera vez un plan de actuación común frente a la epidemia de virus respiratorios”, ha escrito el número dos del Ministerio en X.

El documento –redactado por técnicos de todas las administraciones– planteaba cuatro escenarios de riesgo, del 0 al 3, con una aplicación progresiva del uso de la mascarilla. De hecho, había sido aprobado en la ponencia técnica –un nivel inferior– hace una semana. Sin embargo, en la reunión de este jueves se han puesto sobre la mesa disprepancias que han terminado por posponer la votación por la falta de acuerdo. El Ministerio convocará un nuevo encuentro en unos días y seguirá estudiando el texto con las enmiendas que envíen las comunidades.

La directora general de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, Elena Andradas, ha asegurado que su región, gobernada por el Partido Popular, “no es la única que no está de acuerdo con el documento”. Su argumento es que “adolece de falta de criterio técnico y cierta improvisación”. Es el motivo principal al que aluden las comunidades para explicar el desacuerdo: que el documento está “inmaduro”. Castilla y León también ha manifestado activamente su rechazo, así como Canarias, según fuentes presentes en la reunión.

La representante de Madrid también ha aludido, en declaraciones a la prensa cuando el encuentro todavía no había finalizado, a que “no hay una información que pueda ser comparable entre las comundiades y que nos permita hacer una evaluación del riesgo para implementar medidas de manera simultánea”.