Los 27 tendrán que analizar si ponen en marcha contramedidas ya dado que Trump ha anunciado aranceles de forma unilateral cuando veían cerca el acuerdo. Los ministros de Comercio se reúnen este lunes
Trump anuncia aranceles del 30% para la UE a partir del 1 de agosto
La Comisión Europea “toma nota” del anuncio unilateral de Donald Trump de imponer aranceles del 30% a las exportaciones europeas después de dos meses de intensa negociación en la que la UE veía cerca un acuerdo que permitiera profundizar en una segunda fase de conversaciones. Sin embargo, el presidente de EEUU ha enviado una carta a Ursula von der Leyen en la que le comunica la entrada en vigor de esos gravámenes. En Bruselas aún confían en poder llegar a un entendimiento que evite esos aranceles del 30% antes del 1 de agosto, aunque tiene que analizar la nueva situación y si impone contramedidas.
“Tomamos nota de la carta enviada por el presidente estadounidense Trump en la que esboza una tasa arancelaria revisada y un nuevo calendario. La imposición de aranceles del 30 % a las exportaciones de la UE interrumpiría cadenas de suministro transatlánticas esenciales, en detrimento de empresas, consumidores y pacientes a ambos lados del Atlántico”, lamenta Von der Leyen en un comunicado.
La presidenta de la Comisión Europea recuerda que encontrar una “solución negociada” ha sido la “prioridad” del bloque comunitario desde que Trump llegó a la Casa Blanca. Y muestra de nuevo esa voluntad: “Seguimos dispuestos a seguir trabajando para llegar a un acuerdo antes del 1 de agosto”.
Ahora bien, los 27 tendrán que decidir si ponen en marcha contramedidas ya o a partir del 1 de agosto en caso de no llegar a un acuerdo. “Al mismo tiempo, tomaremos todas las medidas necesarias para salvaguardar los intereses de la UE, incluida la adopción de contramedidas proporcionadas en caso necesario”, reza el comunicado difundido este sábado, una hora después de que Trump publicara su carta en su red social. No obstante, Washington había avisado a Bruselas con anterioridad.
Entre las decisiones que tiene que tomar la UE es si mantiene o no la suspensión de los aranceles con los que contestó al primer golpe de Trump al acero y el aluminio. Se trataba de un paquete de aranceles por un valor de 21.000 millones de euros que se quedó congelado cuando el presidente de EEUU planteó una tregua de 90 días a la guerra comercial, que para entonces ya había escalado con aranceles recíprocos del 20% o un 25% a los vehículos europeos. La suspensión vence en la madrugada de este 15 de julio.
La víspera se reúnen los ministros de Comercio en Bruselas, donde abordarán este asunto, que en todo caso, se maneja al máximo nivel entre la Comisión Europeo y los jefes de Gobierno de los 27.
La UE ha estado trabajando igualmente en otro paquete de contramedidas por un valor total de 95.000 millones de euros ante la constatación de que una parte de los nuevos aranceles de Trump habían llegado para quedarse. De hecho, en el principio de acuerdo en el que estaban trabajando se asumía un gravamen del 10%, como ocurrió en el caso de Reino Unido. La UE estaba intentando lograr excepciones para algunos bienes, como el vino o los aviones comerciales. Según ha publicado Bloomberg este sábado por la mañana, los productos agrícolas y los vehículos estaban complicando la recta final de las conversaciones.
De hecho, en la UE esperaban un “principio de acuerdo” prácticamente inminente hace un par de días. También Trump señaló al jueves como la fecha en la que habría noticias sobre la guerra comercial con el bloque comunitaria. Y, finalmente, la carta que el portavoz de comercio pensaba que no iba a llegar, llegó. No hay acuerdo, por ahora, aunque la UE intentará negociarlo hasta el final. Por ahora la nueva fecha es el 1 de agosto.