«Los aranceles comenzarán a pagarse el 1 de agosto de 2025. No ha habido cambios en esta fecha [que él fijó un día antes] ni los habrá», proclama el presidente de EEUU a las 24 horas de haber concedido una prórroga de tres semanas y de afirmar que la fecha era «firme, pero no 100% firme»
Trump alarga el plazo de negociación de los aranceles hasta el 1 de agosto mientras envía cartas presionando a varios países
Hay mucha gente que ya no se fía de la palabra de Donald Trump, que considera que nunca termina de cumplir sus amenazas relacionadas con los aranceles. Y por eso lo han bautizado como TACO, es decir, Trump Always Chickens Out —Trump siempre se raja—, un mote del que el presidente de EEUU se enteró hace unas semanas durante una comparecencia ante la prensa en la Casa Blanca.
Y lo cierto es que los aranceles no han dejado de ser una montaña rusa: anuncios y rectificaciones, fechas límite y prórrogas, una cifra y luego otra.
Es más, este mismo lunes por la noche, al ser preguntado si las cartas enviadas este lunes a 14 países eran una “oferta final”, Trump respondió que sí, pero que “si llaman con una oferta diferente y me gusta, la aceptaremos”. Y sobre la nueva fecha del 1 de agosto, dijo que era “firme, pero no 100% firme”.
A raíz de ese patrón, el TACO se cocinó el 2 de mayo. Aquel día, el columnista del Financial Times Robert Armstrong escribía: “El reciente repunte económico tiene mucho que ver con que los mercados han llegado a la conclusión de que la administración estadounidense no tiene un umbral muy alto de tolerancia al dolor económico y de los mercados, y que se echará atrás rápidamente cuando los aranceles empiecen a causar estragos. A esto se le ha llamado la teoría del TACO: Trump Always Chickens Out —Trump siempre se acobarda—”.
El concepto, escondido en medio de un análisis sobre la coyuntura económica, comenzó a crecer hasta estallar en la Casa Blanca la semana pasada, cuando la periodista de CNBC, Megan Cassella, coge el micrófono y le pregunta a Trump. “¿Que me echo atrás? ¿Que me acobardo? Nunca había oído eso”, responde Trump enfurecido, “y tú vienes con una pregunta tan desagradable como esa… Se llama negociar. No vuelvas a decir eso. Es una pregunta muy desagradable. Es de las más desagradables que me han hecho”.
Dos días después de esa respuesta, Trump anunció que duplicaba los aranceles al acero y al aluminio, del 25% al 50%. Pero también es cierto que, después de anunciar aranceles desorbitados —pendientes del proceso judicial— el 2 de abril, en el llamado “día de la liberación”, los dejó finalmente en el 10%; y que tras anunciar un 145% a China, lo rebajó al 30% mientras se negocia, algo parecido a lo que ocurrió con Canadá y México.
Y ahora, cuando las negociaciones que arrancaron en abril debían concluir el 9 de julio –“90 acuerdos en 90 días”–, resulta que este lunes anunció que la fecha límite se prorrogaba hasta el 1 de agosto.
¿Trump Always Chickens Out? ¿Trump siempre se raja? De momento, lo que sí hace es generar caos en todo el mundo.
“De acuerdo con las cartas enviadas ayer [por el lunes] a varios países”, ha publicado este martes Donald Trump en Truth Social, “además de las cartas que se enviarán hoy, mañana y durante los próximos días, los aranceles comenzarán a pagarse el 1 de agosto de 2025. No ha habido cambios en esta fecha [que se fijó 24 horas antes] ni los habrá. En otras palabras, todo el dinero deberá pagarse a partir del 1 de agosto de 2025. No se concederán prórrogas”.
Truth Social de aranceles de Trump.
Cartas de presión
El presidente de EEUU ha comenzado este lunes a enviar cartas de notificación de aranceles a Japón (25%), Corea del Sur (25%), Myanmar (40%), Laos (40%), Suráfrica (30%), Kazajstán (25%), Malaisia (25%), Tailandia (36%), Camboya (36%), Serbia (35%), Bangladesh (35%), Indonesia (32%), Bosnia (30%) y Túnez (25%), que aplicará a partir del 1 de agosto: “La cifra es inferior a lo necesario para eliminar la disparidad comercial que tenemos con su país”
Las negociaciones entre EEUU y la UE, por ejemplo, siguen en curso, informa Irene Castro.
“El presidente firmará hoy [por este lunes] un decreto que retrasa la fecha límite del 9 de julio al 1 de agosto”, ha anunciado la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt: “Por lo tanto, estas nuevas tasas se aplicarán el próximo mes, o se llegarán a acuerdos. Hemos visto muchos avances positivos en la dirección correcta, pero la administración, el presidente y su equipo quieren lograr los mejores acuerdos para el pueblo y los trabajadores estadounidenses”. Y ha añadido: “El presidente quiere garantizar que sean los mejores acuerdos posibles. Literalmente, está observando el mapa y cada país del planeta, y viendo dónde están estafando al pueblo estadounidense, dónde han vaciado nuestra base industrial, dónde nuestros empleos se han ido a otros países debido a sus políticas arancelarias”.
Estos aranceles que se están comunicando este lunes, emanan del 2 de abril pasado, cuando Trump anunció aranceles generalizados para todo el planeta.Iban a entrar en vigor el 9 de abril, pero al final la Administración estadounidense se dio hasta el 9 de julio para buscar acuerdos comerciales, como los sellados con Reino Unido y Vietnam, por ejemplo. Un plazo que se ha vuelto a posponer hasta el 1 de agosto, fecha en la que, según ha explicado la Administración Trump, los aranceles entrarán en vigor.