viernes, julio 4 2025

Tellado gana poder interno para «electoralizar» el PP y Feijóo saca a Ana Alós de Igualdad para dárselo a Jaime de los Santos

Tellado ejercerá las funciones que asumían Cuca Gamarra y Carmen Fúnez quien, como la hasta ahora secretaria general, seguirá en el Comité de Dirección como vicesecretaria de Sanidad y Política Social

Miguel Tellado, el guardaespaldas de Feijóo que coqueteó con el nacionalismo escala a número dos del PP

El inminente secretario general del PP, Miguel Tellado, acumulará más poder del habitual como ‘número dos’ al subsumir bajo su mando el área de Organización, habitualmente desgajada en una vicesecretaría propia. El objetivo, “electoralizar el partido”, según un comunicado remitido por el PP este jueves por la tarde. “Asumirá los departamentos que dirigían Cuca Gamarra y Carmen Fúnez. Un mando único en la gestión de los asuntos internos del partido, la relación con las autonomías y el diseño y planificación de los procesos electorales”, apunta el texto. A quien no menciona el comunicado es al actual responsable de Análisis Electoral, Elías Bendodo.

Tellado ejercerá así las funciones que antes asumían Gamarra y Fúnez quien, como la hasta ahora secretaria general, se mantendrá en el Comité de Dirección como vicesecretaria de Sanidad y Política Social. La primera de las carteras la hereda de Ester Muñoz, quien asciende a portavoz en el Congreso. La segunda se la arrebata a la oscense Ana Alós, quien apunta a su salida de la ejecutiva del PP.

La otra cartera que tenía Alós, Igualdad, recae en el diputado Jaime de los Santos, quien entra en el Comité de Dirección como vicesecretario. Además recoge las competencias en Educación que también dependían de Muñoz.

De los Santos estaba hasta ahora integrado en la Vicesecretaría de Cultura, que dependía de Borja Sémper. En el Congreso ejercía como portavoz en la Comisión de Igualdad. En 2013 ocupó espacio en los medios tras publicarse unas fotografías acompañando de compras a la esposa del entonces presidente, Mariano Rajoy. Era asistente de Elvira Fernández, cargo por el que se embolsaba 60.000 euros brutos al año.