jueves, junio 26 2025

Pedro Sánchez responde a Trump que España es un país «soberano» ante la amenaza de una guerra comercial

El presidente recuerda que los aranceles se negocian en Bruselas ante la intención de EEUU de castigar a España por su rechazo a llevar el gasto militar al 5% del PIB y los califica de «doblemente injustos» por el déficit comercial

El pulso por el gasto en defensa sitúa a España como principal opositor a Trump en la UE

“España es un país solidario, comprometido con los estados de la alianza, pero también soberano y es el equilibrio que encontramos en la declaración que acordamos los 32 estados miembros de la Alianza Atlántica, incluida también Estados Unidos”. Así se ha pronunciado Pedro Sánchez sobre el acuerdo al que llegó con el secretario general, Mark Rutte, para salvar la cumbre de La Haya y que le ha costado una amenaza de recrudecimiento de la guerra comercial por parte de Donald Trump ante la negativa a llevar el gasto militar al 5% del PIB.

A su llegada a la reunión del Consejo Europeo, el presidente ha recordado que “la política comercial se dirige desde Bruselas”, ya que las competencias están transferidas, y que, por tanto, la negociación con EEUU corresponde a la Comisión Europea, como hasta ahora. La nueva amenaza de Trump, esta vez circunscrita a España, se produce en plenas negociaciones para intentar evitar la retahíla de aranceles que fue anunciando: un 20% general, un 50% al aluminio y el acero, un 25% a los coches…

“Europa y el mundo vienen sufriendo una guerra comercial. Vienen sufriendo unas medidas tarifarias y arancelarias que en España calificamos desde el primer momento como injustas y también unilaterales”, ha dicho Sánchez, que ha considerado que los aranceles, en el caso de España, son “doblemente injustos”. Por un lado, por la misma razón que lo considera la UE y, por otro, porque España tiene déficit comercial con ese país, es decir, importa más de lo que exporta.

En lo que no ha querido entrar es en si el enfado de Trump y su nuevo desafío complica aún más la negociación de Bruselas con Washington, que se acerca a la fecha límite que fijaron Trump y Ursula von der Leyen: el 9 de julio. “Son dos ámbitos distintos de debate: uno es el de la Alianza Atlántica y otro es el de la Unión Europea”, se ha limitado a responder en referencia a los aranceles y la negativa de España a disparar el gasto militar.

Aun así, el presidente ha asegurado que “España es un amigo de EEUU” y ha tendido la mano a la negociación con ese país: “Europa ha sido constructiva para fijar unas nuevas reglas comerciales”.

Sánchez ha reiterado que la intención de España es cumplir con los objetivos de capacidad militar que se le han asignado en el marco de la OTAN y se ha mostrado convencido de nuevo de que eso es posible con un 2,1% del PIB, porque así se lo han trasladado las Fuerzas Armadas. Sin embargo, esa cifra no se la creen en la OTAN, donde consideran que es necesario un 3,5% del PIB de cada uno de los aliados. No obstante, en una carta, Rutte daba “flexibilidad” a España para alcanzar los objetivos de capacidad aunque fuera con un porcentaje “inferior”, sin mencionar cifras.