El expresidente de la Generalitat por el PP y ahora senador, Alberto Fabra, fijó en 2011 para evitar el «despilfarro» en los gastos de caja fija de la Generalitat un máximo en las reuniones de trabajo de los altos cargos que el actual equipo del jefe del Consell y el propio presidente han superado en inumerables ocasiones: 1.184 euros en una marisquería de Alicante o comilonas cerca de la oficina por 2.717,30 euros
La ‘guía gourmet’ de Mazón: los mejores restaurantes en los que el presidente de la Generalitat gasta el dinero público
El president de la Generalitat, Carlos Mazón, y su gabinete se gastaron en comidas y reuniones de trabajo entre su llegada al Palau en julio de 2023 y diciembre de 2024 un total de 36.000 euros, según las facturas registradas en la caja fija que se pueden consultar en el portal de Transparencia ‘GVA Oberta’. El detalle de los abonos muestra la querencia del jefe del Consell por los buenos restaurantes y revela gastos llamativos como los 1.184 euros abonados en la marisquería Nou Manolín de Alicante o los 2.717,30 euros pagados de una tacada en la Taberna de Marisa, en pleno centro de València. Esta alegría en la visita a bares y restaurantes contrasta con la que aplicó su predecesor conservador en el Palau de la Generalitat, el expresidente y ahora senador, Alberto Fabra, quien en 2011 ordenó a toda la administración autonómica a limitar a 20 euros el menú para reuniones de trabajo de los altos cargos.
En 2011, saltaron varios escándalos por el uso indebido de los pagos a través de caja fija. Entrecots de 60 euros, copas de güisqui o comidas con marisco. Ante una Generalitat intervenida y atenazada por los casos de corrupción de la etapa de Francisco Camps, Alberto Fabra aplicó un plan de choque para reducir esos gastos y poner orden en el despilfarro. Su portavoz en el Gobierno era la actual alcaldesa de València, María José Catalá, quien calificó estos dispendios en reuniones y encuentros como “poco decorosos”. Fabra llegó a decir a sus altos cargos que las reuniones de trabajo que se pudieran solventar con una videoconferencia, mejor que en una comida de mesa y mantel. Nueve años antes de la COVID-19.
El Consell del Botànic (2015-2023) también hizo hincapié en ahorrar en este tipo de indemnizaciones por motivos de trabajo y excluyó las bebidas alcohólicas como posibles gastos a indemnizar, por lo que cada comensal debería pagar de su bolsillo y no se abonarían por caja fija.
Como contó este martes elDiario.es, la ruta gastronómica del president de la Generalitat en su primer año y medio de mandato tuvo paradas más que interesantes. Una de las más destacadas es Nou Manolín, una conocida marisquería de Alicante. Mazón acudió el 13 de noviembre de 2023 y sufragó con fondos de la caja fija una comida de 1.184,8 euros. En Alicante también disfrutó de una buena comida en la Taska Sidrería por 264,9 euros, que se abonaron el 3 de abril de 2024, o la Taberna del Gourmet, a la que fue en dos ocasiones a costa del erario público, una cuenta costó 202,9 euros (31 de julio) y otra, 379,10 euros (19 de septiembre).
Uno de los establecimientos en los que más dinero se ha gastado es la Taberna de Marisa, un restaurante de tapas especializado en carnes y situado a tiro de piedra del Palau de la Generalitat. Se gastó 2.717 euros, que se abonaron a finales de noviembre. En el mismo restaurante comió Carlos Mazón con Alberto Núñez Feijóo y con María José Catalá a finales de junio del mismo año, tras un acto electoral en València de cara a las autonómicas en el que participó el líder popular. También hay numerosas comidas en este establecimiento en 2024, con facturas registradas por un importe de 219,51 euros, el 31 de julio; 550,8 euros, el 11 de septiembre; 531,45 euros, el 15 de octubre de 2024; 231,75 euros, también el 11 de septiembre; 249,4 euros el 13 de diciembre, o 208 euros el 3 de abril.
Cabe recordar que los 36.000 euros que se gastaron Mazón y su equipo entre julio de 2023 y diciembre de 2024 son aparte de los numerosos caterings y de la comida que se sirve directamente en el Palau de la Generalitat. Por lo que los gastos en manutención del presidente y su equipo han sido mucho mayores. Solo restaurantes, unos 30.000 euros, y otros 6.000 en comidas para llevar encargadas en el Palau de la Generalitat.