El exinspector de la Policía Nacional Ricardo Ferris se sienta este próximo miércoles en el banquillo de los acusados por los bulos racistas que vinculaban inmigración y delincuencia ventilados en un acto de Vox celebrado en València en 2022. Ferris se enfrenta a una pena de tres años de prisión por un presunto delito de odio, solicitada por el Ministerio Fiscal, en un juicio previsto ante la sección segunda de la Audiencia Provincial de Valencia. Ferris fue cesado por el Ministerio del Interior a raíz de estos hechos, destapados por este diario.

La Fiscalía considera que Ferris atribuyó al colectivo inmigrante la “práctica totalidad de la comisión de delitos”, con mensajes “encaminados a propagar el rechazo, el desprecio, la hostilidad y la animadversión hacia los mismos”. Además, el Ministerio Público recuerda que el entonces inspector de Policía usó “datos falsos”.

La fiscal sostiene que “toda la intervención y las entrevistas y publicaciones hechas con posterioridad” al acto de Vox, celebrado en el Ateneo Mercantil de València, también buscaban crear un “ambiente de hostilidad, rechazo y animadversión hacia tal colectivo”.

El escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía reproduce la transcripción de algunos extractos de la conferencia de Ferris y asegura que hizo sus afirmaciones “a sabiendas” de que los datos a los que aludía “eran falsos”, a tenor de las estadísticas oficiales del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJ-CV).

En 2022, año en que Ferris participó en el acto de Vox, el número de infracciones penales en el territorio valenciano cometidas por personas de nacionalidad española fue de 38.872, mientras que las perpetradas por personas de otras nacionalidades ascendió a 19.766.

En materia de delitos contra la libertad e indemnidad sexual, constaban 86 cometidos por españoles y 40 por personas extranjeras.

“Estigmatiza y deshumaniza”, según la fiscal

La representante del Ministerio Público reseña las visualizaciones de los videos de varias entrevistas a Ricardo Ferris con los mismos datos falsos (el de su intervención en un acto de Vox fue retirado de la red).

“Tales publicaciones”, concluye el Ministerio Público, “hechas en todo momento en la condición de policía que ostentaba el acusado, se hicieron a sabiendas de que asociar delincuencia con inmigración no solo difama a las personas migrantes y de procedencia extranjera, sino que estigmatiza, criminaliza y deshumaniza, contribuyendo al fomento y difusión de estereotipos y prejuicios hacia este colectivo, con evidente peligro de rechazo y hostilidad hacia ellas”.

El Ministerio Público pide para Ferris una pena de tres años de prisión como responsable en concepto de autor de un presunto delito cometido con ocasión del ejercicio de los derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizadas por la Constitución.