martes, julio 1 2025

Más de un tercio de los animales carroñeros están en peligro y eso puede causar un grave problema de salud global

Una nueva revisión pone el foco sobre la amenaza a los carroñeros vertebrados, especialmente los más grandes, lo que tiene consecuencias en la retirada de patógenos como el ántrax y la contaminación de las fuentes de agua

Hemeroteca – Las primeras imágenes del lince carroñeando alertan de nuevos peligros para la especie

Los grandes carroñeros, como los buitres, los tiburones y los caimanes, cumplen un papel fundamental en los ecosistemas, al consumir los restos de los cadáveres y eliminar posibles fuentes de enfermedades. Según una revisión publicada este lunes por el equipo de Chinmay Sonawane, de la Universidad de Stanford, un 36% de las especies de carroñeros del planeta están catalogadas como amenazadas o muestran poblaciones en declive, y los animales de gran tamaño se encuentran entre los grupos más afectados.

Para el trabajo, publicado este lunes en la revista PNAS, los autores han analizado la situación de 1.376 especies de vertebrados terrestres, de agua dulce y marinos, que consumen carroña y que están incluidas en la Lista Roja de la UICN, y han detallado la distribución, el estado de conservación y los servicios ecosistémicos de cada especie.

El análisis muestra que los carroñeros son geográfica y filogenéticamente diversos, con más de 200 familias taxonómicas representadas. Lo que ven es que al tiempo que la población de grandes carroñeros diminuye, los de pequeño tamaño, como los roedores, están aumentando. A su juicio, el auge de los carroñeros de pequeño tamaño y generalistas podría incrementar los riesgos de enfermedades que los carroñeros de gran tamaño han ayudado a mitigar.

Las enfermedades zoonóticas matan a millones de personas cada año, y algunas de estas enfermedades pueden provenir de desechos de cadáveres. Por lo tanto, los animales carroñeros, que se alimentan de estos desechos, son importantes para proteger la salud humana

Chinmay Sonawane
Investigador de la de la Universidad de Stanford y autor principal del estudio

“Las enfermedades zoonóticas (de origen animal) matan a millones de personas cada año, y algunas de estas enfermedades pueden provenir de desechos de cadáveres”, explica Sonawane a elDiario.es. “Por lo tanto, los animales carroñeros, que se alimentan de estos desechos, son importantes para proteger la salud humana”. Esto significa, añade, que si se eliminan menos desechos de cadáveres del medio ambiente y hay más zonas de reproducción disponibles para patógenos.

Las principales especies en peligro de extinción suelen ser los grandes carroñeros como los tiburones, como el oceánico de puntas blancas, los albatros, los osos, felinos como el tigre, cocodrilos y aves rapaces como los buitres, señala. “Por otro lado, los carroñeros medianos y pequeños están prosperando”, asegura el autor principal. “Esto también es problemático para la salud humana, ya que aquí se incluyen perros, cerdos y roedores asilvestrados, animales que pueden transmitir enfermedades a las personas”.

Un coste invisible

La retirada de cadáveres de la naturaleza tiene, además, una traducción en términos económicos que no siempre apreciamos y que los autores han tratado de documentar. “Los carroñeros destacan por eliminar impresionantes volúmenes de residuos”, escriben.

Las hienas manchadas (Crocuta crocuta), por ejemplo, consumen anualmente 200 toneladas de desechos de cadáveres de ganado en Mekelle, Etiopía y en España, los buitres ahorran millones de euros a los agricultores cada año al retirar los restos de reses muertas del terreno. En América, los autores calculan que los buitres americanos (Cathartes aura) eliminan anualmente alrededor de 1,5 millones de toneladas de residuos, ahorrando casi mil millones de dólares en costos de eliminación.

Antoni Margalida, investigador en Instituto Pirenaico de Ecología (IPE), cree que el estudio es una aproximación global que muestra el impacto que puede tener la pérdida o reducción de consumo de carroña debido a la regresión de estas especies. “El artículo refuerza las evidencias disponibles de estudios previos”, comenta al SMC. “Esto puede facilitar la proliferación de patógenos, con la consiguiente amenaza para la salud humana”.

José Antonio Donázar Sancho, profesor de investigación en la Estación Biológica de Doñana (CSIC), considera que el valor que tiene esta publicación es lograr una visión de síntesis. “La transcendencia que puede tener es que al ser una publicación top puede dar más visibilidad al problema, sobre todo si las conclusiones son divulgadas al gran público”, asegura.