La maniobra para tejer un relato que desautorice el poder de los jueces y deje vía libre a las aspiraciones del presidente estadounidense Donald Trump continúa. En la entrevista conjunta de Elon Musk y el republicano que se ha emitido este martes por la noche en la cadena Fox, el hombre más rico del mundo ha defendido que un sistema democrático se basa en el despliegue del poder presidencial sin límites, pues “es el representante del pueblo”. 

“Si la voluntad del presidente no se implementa, y el presidente es el representante del pueblo, eso significa que la voluntad del pueblo no se está llevando a cabo, y eso significa que no vivimos en una democracia, sino en una burocracia. Así que creo que lo que estamos viendo aquí es, en cierto modo, la agitación de la burocracia mientras intentamos restaurar la democracia y la voluntad del pueblo. Por supuesto, eso no debería ocurrir”, ha dicho Musk al periodista Sean Hannity, mientras Trump no paraba de sonreír.

En su argumentación, el multimillonario ha obviado que también existe un Congreso (conformado por representantes elegidos también en las urnas) que representa esa voluntad y cuyas competencias el presidente está intentando traspasar a base de decretos. El ejemplo más conocido es el desmantelamiento de USAID vía orden ejecutiva, a pesar de que la agencia de cooperación internacional fue establecida por el Congreso y su financiación era requerida por la ley. Es al intentar extralimitarse en sus funciones, cuando los tribunales empiezan a bloquear las acciones ejecutivas para revisar si la Constitución otorga realmente ese poder al presidente. Musk también ha ignorado que él tampoco es un cargo electo en las urnas. 

Las declaraciones de Musk suponen una escalada más en la campaña que hace días que la administración Trump ha puesto en marcha para erosionar la legitimidad del poder judicial, que se ha convertido en la principal línea de defensa ante el incesante tsunami de órdenes ejecutivas. Este mismo martes, antes de la emisión de la entrevista, Trump ha firmado desde su mansión de Mar-a-Lago una nueva orden con la que busca logra una mayor autoridad sobre las agencias, las cuales el Congreso estableció que eran independientes del control directo de la Casa Blanca. Se trata de un nuevo movimiento para poder centralizar el poder presidencial sobre el gobierno.

Buena sintonía 

La entrevista conjunta se ha emitido justo una semana después de que Musk y Trump comparecieran juntos desde el Despacho Oval. Una vez más, el republicano ha presumido de que su amistado con el hombre más rico del mundo es más fuerte que los supuestos intentos de separarlos.

“Un día me llamó Elon – ha recordado Trump- ”y me contó: ‘¿has visto que tratan de separarnos? Y le contesté. ‘Absolutamente’. Lo quieren presentar como si fueran noticias de impacto; buscan hacerme daño diciendo que he cedido el control de la presidencia, que ‘el presidente Musk’ participa en los asuntos de mi gabinete. Pero no lo están consiguiendo. Solía pensar que [los medios que lo critican] eran buenos, pero no lo son, porque si no, habrían logrado que no fuera presidente. Pero, ¿sabes lo que he aprendido, Elon? Que la gente es inteligente. Que lo pilla. Que comprende lo que estamos haciendo“.

Trump no solo ha querido evidenciar la amistad con Musk, sino que ha vuelto a hacer explícito su total apoyo al desmantelamiento de la administración estadounidense que está llevando a cabo al frente del DOGE. De hecho, ha dejado claro que eso es lo que más le gusta de él. “El equipo que tenemos es realmente increíble, pero esas órdenes ejecutivas las firmo yo y ahora se las pasan a él y a su grupo y a otras personas, y todas se están cumpliendo, las estamos cumpliendo”, ha dicho el republicano.

En el casi primer mes al frente del DOGE, Musk ya ha logrado poner la administración patas arribas y suspender miles de trabajadores federales. Todo bajo el pretexto de, supuestamente, ahorrar millones de dólares a los contribuyentes. De momento lo único que se ha ahorrado son algunas investigaciones que había contra sus empresas y que han quedado congeladas con el descalabre dentro de las agencias y departamentos. 

Al haber sido grabada con anterioridad, en la entrevista no se ha mencionado el documento judicial que este lunes presentó la Casa Blanca, donde afirmaba que Musk no es el administrador oficial del DOGE – como se había dado a entender- sino un empleado de la misma Casa Blanca. La revelación no ha hecho que crear aún más confusión en torno al grupo de trabajo que, supuestamente, lidera Musk, tal como anunció Trump en su momento.

La supuesta “transparencia” que Musk y Trump defendían ante el conflicto de intereses no ha hecho más que enturbiarse con el documento de la Casa Blanca. En la entrevista, Hannity ha preguntado si alguien en el DOGE tiene paga. A lo que Musk ha respondido: “Bueno, en realidad algunas personas son empleados federales. Es justo decir que los ingenieros de software en DOGE podrían estar ganando millones de dólares al año en lugar de ganar solo una pequeña fracción de eso como empleados federales”. 

Quiénes son esos empleados aún tampoco está claro, pues no ha habido mucha información sobre su contratación. Tan solo se sabe que buena parte de los colaboradores de estos trabajaron para las empresas de Musk. En la entrevista, el multimillonario ha afirmado que se llegaría a descalificar a sí mismo si hubiera un conflicto de intereses. 

Trump ha elogiado constantemente a Musk, diciendo que cuando intentó encontrar a alguien más inteligente que él no fue capaz. Así mismo, Hannity también se ha deshecho en alabanzas para Musk. “Los demócratas te están demonizando y tratando de hacer que el país te odie. Solo quiero que la gente te entienda un poco mejor, y ahora has ganado mucha confianza”, ha dicho el presentador al principio de la conversación. 

Otro fragmento destacable del masaje hecho por el periodista de la FOX a Musk ha sido cuando ha vinculado todos sus negocios, como Neuralink o SpaceX, a fines puramente humanitarios: “Entonces, tú estás comprometido en ayudar a los ciegos a ver, a las personas con lesiones en la médula espinal a recuperarse. Sí, estás comprometido en llegar a Marte”.

Musk también ha descrito como su vida cambio después de apoyar públicamente a Trump durante la campaña. “Antes, la izquierda me adoraba. Ahora ya no tanto”, dijo. El multimillonario se inventó “el síndrome de trastorno inducido por Trump” para describir la reacción de un amigo en Los Ángeles cuando se supo su vinculación con el republicano. “Mencioné su nombre. ¡Y fue como si les hubieran disparado con un dardo en la yugular cargada metanfetamina y [el virus de la] rabia”, ha exclamado Musk, que ha insistido en que cuando menciona a Trump ya “no puedes razonar con la gente”. A lo que Hannity ha respondido: “Cuando eres su amigo, pagas un precio por ello, yo lo sé bien”.