El presidente de EEUU, Donald Trump, ha sugerido este martes que Jeffrey Epstein, el difunto delincuente sexual con el que socializó durante más de una década, “robó” a Virginia Giuffre y a otras jóvenes empleadas que contrató del club de campo Mar-a-Lago del presidente.

Los periodistas a bordo del Air Force One, mientras regresaba a Washington desde Escocia, pidieron a Trump que diera más detalles sobre sus declaraciones anteriores acerca de su ruptura con Epstein por haberle quitado empleados a su negocio. El presidente dijo el lunes que había expulsado al multimillonario de su club “porque hizo algo inapropiado”. Concretamente, afirmó: “Robó a personas que trabajaban para mí”.

Altos cargos de la Casa Blanca han sugerido repetidamente en las últimas semanas que Trump rompió con Epstein alrededor de 2004 y lo expulsó del club Mar-a-Lago por comportamiento inapropiado de naturaleza sexual. En una declaración la semana pasada, el portavoz Steven Cheung dijo que Trump “lo expulsó de su club por ser un cretino”.

La versión del presidente de que la ruptura se debió al resentimiento por haberle robado empleados su amigo arroja una luz diferente sobre la ruptura. El martes, un periodista le preguntó a Trump: “Las trabajadoras que le quitaron, ¿eran algunas de ellos mujeres jóvenes?”. Trump respondió: “La respuesta es sí, lo eran. Personas que trabajaban en el ‘spa”.

Otro periodista le preguntó entonces a Trump si una de las personas a las que se refería era Giuffre –la mujer que acusó al príncipe Andrés de Inglaterra de haber abusado sexualmente de ella cuando era menor–, quien afirmó en una demanda que fue contratada por la cómplice de Epstein, Ghislaine Maxwell, en el ‘spa’ de Mar-a-Lago en el 2000, cuando tenía 16 años.

Giuffre –que se suicidó el pasado abril, según anunció su familia– alegó en su denuncia que primero fue abusada por Epstein y Maxwell juntos, y luego “prestada a otros hombres poderosos”, entre ellos el príncipe Andrés.

Virginia Giuffre, tras declarar ante la Justicia como víctima de violencia sexual, en 2019

“Creo que trabajaba en el ‘spa”, contestó Trump. “Creo que sí. Creo que era una de las personas, sí. Él la robó. Y, por cierto, ella no tenía ninguna queja sobre nosotros, como usted sabe. Ninguna en absoluto”.

El presidente y su Administración están trabajando desesperadamente para cambiar de tema y alejarlo de Epstein, un asunto que últimamente ha revuelto a su base. Pero su última afirmación de que una de esas empleadas era Giuffre, de 16 años, también complica la cronología. Giuffre fue contratada en Mar-a-Lago en el 2000, pero dos años más tarde, Trump elogió a Epstein ante un periodista.

“Conozco a Jeff desde hace 15 años. Es un tipo estupendo”, declaró Trump a la revista New York a finales de 2002. “Es muy divertido estar con él. Incluso se dice que le gustan las mujeres guapas tanto como a mí, y muchas de ellas son bastante jóvenes”.

Sarah Blaskey, periodista de investigación del Miami Herald, también recoge en su libro de 2020 sobre Mar-a-Lago que Epstein siguió figurando en la lista de socios del club hasta octubre de 2007, más de un año después de que fuera detenido y acusado por primera vez de incitar a la prostitución a una menor.

Maxwell, que cumple una condena de 20 años de prisión por conspirar con Epstein para trata sexual de menores, se ha ofrecido a testificar ante el Congreso, pero ha pedido a los legisladores que le concedan inmunidad, junto con otras condiciones importantes, según una lista de exigencias enviada al comité de supervisión de la Cámara de Representantes por sus abogados, a la que ha tenido acceso la CNN.

Lauren Gambino ha colaborado en esta información.