Los eurodiputados de todos los partidos españoles, a excepción de los populares y Se Acabó la Fiesta, que no forman parte del grupo de memoria democrática, envían una carta a la presidenta de la Eurocámara para que revoque la autorización para la exhibición que Vox ha organizado bajo el nombre “La Cruz como símbolo de las raíces cristianas de Europa”
Vox dice que los presos que construyeron el Valle de los Caídos eran “voluntarios” que cobraban “el mismo salario que los obreros libres”
Revuelta en el Parlamento Europeo contra el intento de Vox de blanquear el Valle de los Caídos la semana del 18 de julio. El partido de la extrema derecha ha organizado una exposición en el edificio de la Eurocámara que inaugurará este martes bajo el nombre “La Cruz como símbolo de las raíces cristianas de Europa” con la intención de “recorrer la historia, valor artístico y dimensión espiritual” de la que es la mayor fosa común de la guerra civil. Los partidos con representación en el grupo de memoria han enviado una carta a la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, para que revoque la autorización de esa muestra en los pasillos de la institución.
“Tras este título genérico, la exposición ha resultado ser en realidad un intento de blanquear el fascismo. Según la invitación oficial distribuida por uno de los diputados de esta Cámara, la exposición está dedicada al conjunto monumental del Valle de los Caídos: incluye paneles explicativos, fotografías originales, una maqueta del lugar, así como aportaciones de conocidos defensores de la reinterpretación del monumento y de la dictadura franquista en España”, señalan en la misiva en la que recuerdan que la inauguración coincide con la semana del 18 de julio, que es la efemérides del golpe de estado de Franco. “No puede considerarse una coincidencia o un acto neutral. Constituye claramente una celebración de un régimen dictatorial”, denuncian.
“El Valle de Cuelgamuros se construyó bajo el régimen de Francisco Franco utilizando mano de obra forzada de presos políticos y, durante décadas, albergó los restos del dictador en un lugar destacado del monumento. Además, los cuerpos de más de 33.000 víctimas fueron trasladados al lugar, muchos de ellos sin el consentimiento de sus familias. Por sus orígenes y simbolismo, este lugar representa la dictadura y el sufrimiento de miles de represaliados”, recuerdan en la carta, firmada por Juan Fernando López Aguilar (PSOE), Vicent Marzá (Compromís), Jaume Asens Llodrà (comunes), Pernando Barrena Arza (Bildu), Estrella Galán (Sumar), Ana Miranda (BNG), Diana Riba (ERC), Oihane Agirregoitia Martínez (PNV), Irene Montero e Isa Serra (Podemos).
El PP no figura entre los firmantes ya que no forma parte del grupo de memoria democrática, según explican los impulsores de la carta. Lo mismo ocurre en el caso de los eurodiputados de la ultraderecha de Se Acabó la Fiesta, la candidatura que impulsó Luis ‘Alvise Pérez.
“El uso del nombre Valle de los Caídos en el cartel que acompaña a la invitación -en lugar de su nombre oficial, «Valle de Cuelgamuros»- es en sí mismo un acto de revisionismo y glorificación del pasado franquista”, agrega la carta, que recuerda que la ley de memoria democrática cambió ese nombre por el de Valle de Cuelgamuros en un intento por resignificar el lugar. Los firmantes recuerdan que esa ley prohíbe el enaltecimiento de la dictadura, así como el tratado de funcionamiento de la UE aboga por el cumplimiento de los principios democráticos como valor fundamental. “Eso es precisamente lo que pretende la exposición de mañana: glorificar una dictadura cruel y sangrienta que suprimió las libertades en nuestro país durante casi 40 años”, señalan.
En principio el Parlamento Europeo se lava las manos y no pretende tomar cartas en el asunto. “Los eurodiputados tienen la posibilidad de celebrar actos culturales o exposiciones en el Parlamento Europeo. Cada eurodiputado tiene derecho a patrocinar dos actos culturales o exposiciones por legislatura. Los actos culturales y exposiciones deben ser autorizados previamente por el Cuestor, como fue el caso de esta exposición”, señalan los servicios de prensa. Los Cuestores componen el órgano del Parlamento Europeo responsable de los asuntos administrativos y económicos que afectan directamente a los diputados y a sus condiciones de trabajo. Se trata de cinco eurodiputados: dos del PPE, un socialista, una liberal y uno de la extrema derecha del grupo de los Reformistas y Conservadores (ECR).
“Si quieren glorificar una dictadura, los tenemos que expulsar de las democracias. Aquí no hay espacio para quienes pretenden glorificar a Franco ni para los que utilizan símbolos religiosos como coartada para reescribir la historia. Lo que Vox está intentando hacer con esta exposición es repugnante: blanquear una dictadura asesina desde el Parlamento Europeo. No lo vamos a permitir. Esta institución no puede ser cómplice del revisionismo franquista ni un altavoz para la extrema derecha”, dice el eurodiputado de Compromís, Vicent Marzá.