miércoles, julio 9 2025

La lugarteniente de Elon Musk en X dimite tras dos años en el cargo

Linda Yacarino, que se va sin explicar los motivos, llegó a la red social en 2023 como directora ejecutiva con la misión de frenar la fuga de anunciantes

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Linda Yacarino lo deja. La que ha sido directora ejecutiva de X desde poco después que Elon Musk se hiciera definitivamente con el control de la red social, ha dimitido este miércoles de su puesto sin explicar los motivos. “Después de dos años increíbles, he decidido dejar el cargo de CEO de X”, ha comunicado a través de una publicación en la plataforma que dirigía.

Musk fichó a Yacarino (61 años) desde la cadena NBC a mediados de 2023. El multimillonario había despedido ya a dos tercios de la plantilla que componía la red social, por entonces aún llamada Twitter, y estaba comenzando a recomponerla. Su principal reto era volver a atraer a los anunciantes que Musk había espantado con las formas que había utilizado para echar a los trabajadores, informándoles de un día para otro a través de correo electrónico, así como por su decisión de suavizar las normas de moderación y devolver la cuenta a usuarios expulsados por sus discursos violentos, racistas o machistas.

“Cuando Elon Musk y yo hablamos por primera vez de su visión para X, supe que sería la oportunidad de mi vida”, ha declarado Yacarino en su mensaje de despedida. “Le estoy inmensamente agradecida por confiarme la responsabilidad de proteger la libertad de expresión, transformar la empresa y convertir a X en una aplicación para todo”, ha declarado.

Yacarino también debía ocuparse de la dirección del día a día de la empresa y descargar de esas labores a Musk, que ocupa puestos de dirección en otras seis compañías, entre las que se encuentran Tesla o SpaceX. Sin embargo, el multimillonario no se lo puso fácil, con constantes cambios de rumbo para la plataforma ordenados a raíz de sus conversaciones con los propios usuarios. Tampoco facilitó la misión de conseguir ingresos publicitarios, puesto que sus exabruptos, su acercamiento a la ultraderecha y sus ataques a figuras públicas mantenían a las empresas relevantes fuera de la plataforma.

La situación llegó a un punto límite que Musk llegó a reconocer, al afirmar en 2024 que X estaba “al borde de la quiebra”. Sin embargo, la victoria de Donald Trump en las elecciones de 2025 reconcilió a la red social con una notable parte de los anunciantes, que a partir de entonces dejaron de ver X como una plataforma tóxica por ser del gusto del nuevo presidente.

La red social terminó de espantar los fantasmas de bancarrota el pasado marzo, cuando Musk tomó la decisión de vender X bajo a xAI, su startup de inteligencia artificial. Esta, cuyos productos están entrenados a partir de la actividad de los usuarios de la plataforma, ha disparado su valor y tiene mucho más fácil el acceso a la financiación de fondos de capital riesgo.

La operación valoró a xAI en 80.000 millones de dólares y a X en 33.000 millones, según Musk. Desde entonces, xAI ha estado en conversaciones para obtener nueva financiación que podría alcanzar los 120.000 millones de dólares.

Musk, acostumbrado a una alta rotación entre los altos ejecutivos de las empresas que posee, no ha reaccionado por el momento a la salida de Yacarino. “Estoy increíblemente orgullosa del equipo X: el cambio histórico en el negocio que hemos logrado juntos ha sido nada menos que extraordinario”, ha declarado la ya ex CEO de X: “Ahora, lo mejor está por venir, ya que X inicia una nueva etapa con xAI”.