martes, junio 24 2025

Protesta frente a la basílica de la Macarena por la polémica restauración de la Virgen

Hermanos y devotos exigen la dimisión de la junta de gobierno de la hermandad tras la controversia que ha provocado la nueva imagen de la Esperanza, sometida a dos intervenciones en menos de 24 horas

Enorme polvareda en Sevilla por la restauración de la Macarena: piden perdón y culpan a las nuevas pestañas

Un grupo de hermanos y devotos de la Hermandad de la Macarena se ha manifestado la tarde de este lunes a las puertas de la basílica para exigir la dimisión de la junta de gobierno, en medio de la polémica generada por los recientes trabajos de restauración de la Virgen de la Esperanza. “Nos han tocado lo que más amamos y ahora más que nunca hay que demostrar ese amor y pedir que asuman responsabilidades”, rezaban algunos de los mensajes difundidos en redes sociales para llamar a la concentración convocada al final de la tarde de este lunes.

El acto de protesta “pacífica” se ha llevado a cabo a la vuelta de un fin de semana en el que la imagen de la Esperanza se ha sometido a tres intervenciones consecutivas, dos de ellas en menos de 24 horas. La talla ha estado cinco días retirada del culto para estos trabajos, y cuando este sábado se ha repuesto y se ha podido ver el resultado se ha levantado una enorme polvareda, con numerosas voces denunciando un cambio radical en la apariencia y su expresividad tradicionales, que la hermandad achacó a unas pestañas nuevas, ya retiradas.

Ante la cascada de críticas, se procedió a un arreglo exprés a primeras horas de la tarde del sábado, pero los resultados siguieron sin convencer una vez que la basílica de la Macarena reabrió a las 18 horas. Las aguas parecían haber vuelto a su cauce tras una segunda intervención exprés que tuvo lugar en la noche del sábado al domingo, tras la cual se ha bajado la imagen de su camarín y se ha colocado frente al altar mayor del templo para que así los feligreses “contemplen en la cercanía” la talla.

No obstante, decenas de hermanos y devotos se han concentrado frente a la basílica para mostrar su indignación y pedir responsabilidades a la junta de gobierno, que ha guardado silencio durante todo el lunes. Ante el revuelo, la hermandad ha anunciado que suspendía la misa de acción de gracias prevista para esta tarde, así como la posterior convivencia eucarística de las Hermandades de la Madrugada.

La culpa, de las pestañas

La sorpresa que ha causado la nueva imagen de la Macarena ha sido aún mayor por inesperada, ya que la propia corporación no anunció una restauración en sí, sino “trabajos de mantenimiento y conservación” sobre la imagen de la dolorosa y también la del Señor de la Sentencia. El resultado en esta última imagen no ha generado revuelo alguno, pese a que los responsables de la tarea ha sido el mismo equipo de conservadores restauradores dirigidos por el catedrático emérito Francisco Arquillo Torres.

La indignación en redes sociales y entre hermanos que se acercaron el sábado a la basílica a pedir explicaciones provocó una reacción de la hermandad, que por la mañana cerró el templo antes de tiempo para avisar de nuevo a los restauradores. La reapertura de las puertas, ya por la tarde, se hizo coincidir con un comunicado en el que se apuntaba que se había procedido a corregir “un efecto indeseado provocado por las pestañas sustituidas durante la intervención”.

“La hermandad comprende, y comparte, las muestras de preocupación de hermanos y devotos, de ahí que haya actuado con la mayor diligencia posible, y guiada por criterios técnicos, para reparar esta alteración estética no buscada”, señalaba la nota hecha pública. La corporación, asimismo, pedía “disculpas a hermanos y devotos por este incidente”, aunque incidiendo en que su “afán” es siempre “preservar en las mejores condiciones posibles” la imagen.

Pero las explicaciones ofrecidas por los responsables de la cofradía no fueron satisfactorias para muchas personas, lo que provocó hasta un llamamiento a una concentración de protesta en un momento especialmente delicado para la corporación, que está en un periodo preelectoral de cara a unos comicios en otoño a los que no se presentará el actual hermano mayor, José Antonio Fernández Cabrero, y a los que concurrirán miembros de su junta de gobierno.