“Quiero lanzar un mensaje a la sociedad de Cantabria: aquí nos tienen, aquí estamos en la sede del PSOE, mirando a los ojos de toda esa gente que no respeta la convivencia, a los que les decimos que frente a los discursos del odio, frente a las amenazas, frente a los insultos y frente al grave paso que hemos visto en las últimas horas, frente a ataques vandálicos violentos, frente a atentados contra la sede del Partido Socialista, aquí vamos a estar los demócratas. No nos van a callar, no nos van a amedrentar”.

Así se ha pronunciado este sábado el secretario general de los socialistas cántabros, Pedro Casares, en una convocatoria pública de urgencia en el que ha estado acompañado por más de un centenar de militantes, simpatizantes, representantes de organizaciones sociales, ciudadanos anónimos y la práctica totalidad de su Ejecutiva, y que ha tenido lugar en la sede del PSOE de Cantabria, que fue objeto este pasado viernes de un ataque violento a manos de un encapuchado que lanzó varios artefactos explosivos caseros en su interior durante la celebración de un acto sobre memoria democrática.

“Nos estamos acostumbrando a normalizar los insultos y las amenazas en la calle o en las redes sociales. Hemos tenido desde hace mucho tiempo pintadas y mensajes en nuestra sede, pero la verdad es que no esperábamos algo así”, ha explicado Casares visiblemente emocionado, entre lágrimas y largos aplausos de los asistentes, que han interrumpido en varias ocasiones sus palabras para mostrar su apoyo al líder de los socialistas cántabros.

“Detrás de los discursos del odio, detrás de los insultos, vienen las consecuencias, y ayer hemos visto esta, que se ha quedado en lo que se ha quedado, pero que podía haber ido a más porque se ha producido en un acto público en la sede de un partido político con muchas personas”, ha advertido Casares durante una intervención en la que también ha agradecido las numerosas muestras de cariño que ha recibido tras conocerse este ataque y al tiempo que ha lamentado la falta de solidaridad y falta de condena por parte de la extrema derecha.

“Un mensaje también hacia ellos: sus discursos, sus acciones y sus silencios son en muchas ocasiones cómplices de las consecuencias que estamos viendo en las calles y en las sedes de los partidos políticos. Lamentablemente no esperamos nada de la ultraderecha ni de los que en muchas ocasiones amparan este tipo de mensajes de la sinrazón y la barbarie de personas que no respetan la libertad ni la democracia”, ha asegurado el líder de los socialistas cántabros, para el que “llevamos demasiado tiempo normalizando discursos de odio, amparando discursos de odio desde la tribuna parlamentaria, en espacios públicos o ante los medios de comunicación” y “es el momento en el que todas las fuerzas políticas condenen cualquier ataque violento y cualquier discurso del odio”.

En este sentido, Casares ha recordado que, 50 años después de la muerte de Franco y tantos años después de la primera ley de memoria histórica, la charla en la que se produjo el ataque violento de un encapuchado aún sin identificar se había organizado para reconocer el cambio de nombres franquistas de varias calles de Santander y se celebraba también que se había impedido un acto de la Fundación Francisco Franco en un hotel de la ciudad para ensalzar a la dictadura.

En este sentido, Casares ha dicho que desde el PSOE van a seguir haciéndolo “por tanta gente que no pudo vivir en paz, por tanta gente que lucho por la paz y por tanta gente que se quedó por el camino en defensa de la democracia en España”. “Aquí vamos a estar el PSOE, con toda la Comisión Ejecutiva Autonómica, con la fuerza de la militancia y con la fuerza de todos los demócratas para defender aquello que nos costó tanto conquistar”, ha enfatizado.