miércoles, marzo 12 2025

Sánchez Acera desvincula a Moncloa de la filtración del correo de la pareja de Ayuso y asegura que le llegó por la prensa

La exasesora de Óscar López y secretaria de organización del PSOE en Madrid niega haber recibido de la Fiscalía el email con la confesión de Alberto González Amador y no ha recordado qué periodista concreto se lo hizo llegar

Un año del fraude de la pareja de Ayuso: el caso que quiso cerrar en secreto el “técnico sanitario” que era comisionista

Pilar Sánchez Acera, exasesora en Moncloa y mano derecha de Óscar López como secretaria de organización del PSOE madrileño, ha negado este miércoles en el Tribunal Supremo que participara en la filtración de la confesión de la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Según ha relatado al juez Ángel Hurtado, indican fuentes jurídicas, ha negado haber recibido ese correo de la Fiscalía y ha negado también haber recibido órdenes de Moncloa para su difusión.

Ante el juez, como testigo y durante aproximadamente una hora, Sánchez Acera ha explicado que recibió ese correo de periodistas que cubren la información de la Comunidad de Madrid pero sin recordar de qué informador concreto se trataba. Ha afirmado que tras abandonar la Moncloa cambió de teléfono móvil. Posteriormente ha declarado Francesc Vallès, entonces secretario de Estado de Comunicación, que también ha negado haber participado en cualquier tipo de filtración.

Pilar Sánchez Acera, secretaria de organización del PSOE en Madrid, y Francesc Vallès, exsecretario de Estado de Comunicación, fueron llamados a testificar por el juez Hurtado después de que Juan Lobato acudiera a declarar al Tribunal Supremo. El hoy senador y entonces líder de los socialistas madrileños explicó en el Supremo que Sánchez Acera, en la mañana del 14 de marzo de 2024, le envió el correo íntegro con la confesión de la pareja de Ayuso para que lo esgrimiera en la Asamblea de Madrid esa misma mañana. Sucedió, según su testimonio, antes de que lo publicaran los medios de comunicación.

Lobato ha explicado en varias entrevistas y comparecencias públicas que consignó aquellos mensajes ante un notario para esquivar una posible imputación, considerando entonces que no podían usar en público una documentación que todavía no se había hecho pública. La Guardia Civil certificó en un informe que la entonces asesora de Moncloa había tenido acceso a esa información pero los mensajes aportados por Lobato no revelaron cómo había obtenido el correo: “Porque llega, la tienen los medios”, dijo a preguntas de Lobato.

Los mensajes aportados por Lobato también reflejan cómo Vallès, entonces máximo responsable de comunicación en la Moncloa, se interesó por el asunto. El juez dedujo entonces que existió una estrategia conjunta desde la Fiscalía y el Gobierno para filtrar la confesión del empresario y perjudicar a Isabel Díaz Ayuso, aunque finalmente decidió citar a Sánchez Acera y Vallès como testigos.

Ante el juez, Sánchez Acera ha intentado desvincular sus mensajes de la Fiscalía y también de la Moncloa en la que entonces trabajaba como jefa de gabinete de Óscar López, enmarcando esas conversaciones en su condición de miembro de la ejecutia del PSOE madrileño que en esas fechas todavía dirigía Lobato.

Francesc Vallès, antiguo secretario de Estado de Comunicación, ha testificado para negar ante el juez Ángel Hurtado que él participara en la filtración de la confesión de la pareja de Isabel Díaz Ayuso. En ningún momento le mandó el documento a Juan Lobato, entonces líder del PSOE de Madrid, y solo lo conoció cuando fue publicado por la prensa en la mañana del 14 de marzo.

Vallès ha explicado al juez que en esas fechas estaba centrado en las elecciones catalanas y que en esos días se limitó a rebotar a Lobato las noticias que iban publicándose sobre el caso de Alberto González Amador. Ha negado haber instado a Lobato o a su entorno a publicar ese correo.